EL FINANCIERO / Opinión / Raymundo Riva Palacio/Estrictamente Personal / El 21 de marzo se inaugurará el nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, la megaobra con la cual el presidente Andrés Manuel López Obrador sepultará el sueño de Texcoco. La obra militar está terminada en un 85 por ciento, por lo que la primera fase de la construcción podrá ser entregada en tiempo y forma. Pero será lo único, porque Santa Lucía, el asiento de la base aérea que le sirvió de placenta, carece de vías de acceso funcionales para que pueda operar con la normalidad que requiere un aeropuerto de esa escala. A finales del año pasado, la conectividad terrestre de ese aeropuerto apenas rebasaba 40 por ciento, y sólo se refería a la modernización…
El 21 de marzo se inaugurará el nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, la megaobra con la cual el presidente Andrés Manuel López Obrador sepultará el sueño de Texcoco. La obra militar está terminada en un 85 por ciento, por lo que la primera fase de la construcción podrá ser entregada en tiempo y forma. Pero será lo único, porque Santa Lucía, el asiento de la base aérea que le sirvió de placenta, carece de vías de acceso funcionales para que pueda operar con la normalidad que requiere un aeropuerto de esa escala.
